En primer lugar, los sistemas privados aislados, conocidos como sistema espontáneo de ayuda o Informal. Realizado por familia, amigos o vecinos, es el sistema más antiguo, pero no ha desaparecido. Prueba de ello es la obligación legal de prestación de alimentos entre parientes, establecida desde antiguo en el Derecho civil y, que aún subsiste, entre otras muchas formas de apoyo espontáneo entre particulares.
Una segunda modalidad es el sistema de organizaciones privadas de acción social. Se trata de organizaciones voluntarias sin ánimo de lucro, que actúan dentro de un marco organizado y con una finalidad social. Pueden revestir múltiples modalidades, por ejemplo fundaciones, legados, patronatos, así como organizaciones no gubernamentales.
Caritas y la Cruz Roja, son los ejemplos más conocidos. Estas organizaciones han tenido siempre relevancia y continúan teniéndola. Son consideradas como colaboradoras de los poderes públicos, recibiendo ayudas estatales en forma de subvenciones o desgravaciones fiscales.
En tercer lugar, los sistemas comerciales. Consisten en una modalidad de asistencia que se presta mediante organizaciones privadas y empresas de Servicios, pero con fin lucrativo. Es un sistema frecuente en la cobertura de determinados Servicios, por ejemplo: Residencias de ancianos, guarderías, etc. Este sistema no debe descartarse que incremente su frecuencia en el futuro.
La respuesta estatal o pública a las necesidades, es la que asume el protagonismo en la actualidad. El papel estatal es en nuestros días tan acusado que incluso realiza el control, verificación o inspección de los anteriores sistemas, como se verá a continuación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario